El dolor de muelas consiste en un dolor permanente, con una intensidad que va en aumento. Posiblemente sea uno de los dolores más fuerte e intenso que se puede tener, y algo que puede aumentarlo son los alimentos calientes, las bebidas frías o la masticación.
Cuando se tiene un dolor de muelas, lo mejor es asistir inmediatamente a la consulta del dentista para que localice la causa y ponga el tratamiento más idóneo para ese caso.
Dependiendo de la causa, el dentista pondrá un tratamiento u otros. En algunas ocasiones la causa está directamente en el diente, aunque en otras ocasiones el dolor puede venir por otros motivos que tiene que reconocer el dentista.
La mayoría de las veces se tarda mucho en acudir al dentista, por lo que suele ser necesario realizar una endodoncia para poder salvar la pieza dental.
En otras ocasiones, el dolor puede estar provocado por diversos motivos, por lo que el dentista tendrá que examinar la boca y hacer una radiografía para ver qué origina el dolor y qué tratamiento debería aplicarse.
Causas del dolor
El dolor de muelas habitual lo provoca principalmente la pulpitis, que es la inflamación del tejido pulpar.
Este dolor es debido a la afectación del nervio dental, y el motivo más común es una caries dental muy evolucionada.
Las lesiones por caries hacen posible que las bacterias accedan al interior de las muelas hasta que llegan al nervio, lugar en el que crea la infección bacteriana.
Además, la pulpitis puede ocasionarse por un traumatismo o por otros motivos como el desgaste de los dientes o las lesiones endoperiodentales, aunque no son muy comunes.
En el momento en que la pulpa se inflama, hay presión sobre el nervio dental y los tejidos que lo rodean. Al encontrarse rodeada de dentina, la cavidad de la pulpa no puede liberar la presión y el aumento del flujo sanguíneo por la inflamación genera dolor.
A veces, el dolor es tan intenso que es difícil localizar qué diente lo provoca.
Las causas más comunes de dolor son:
- Caries dental
- Fisura, traumatismo o fractura del diente
- Enfermedades de las encías (periodontitis, gingivitis)
- Absceso dental o periodontal
- Enfermedades de la articulación mandibular
Síntomas
El dolor de muelas consiste en un daño por la zona de la cara, que lo más habitual es que aparezca por algún problema en la dentadura. Puede mostrarse como un dolor permanente en la mandíbula, en la cabeza y en el oído. Además, el origen del dolor normalmente es la irritación del nervio dental producida por una infección.
Los principales síntomas del dolor de muelas son:
- Sensibilidad a la comida fría y/o caliente
- Dolor al masticar
- Sangrados alrededor de la encía o del diente
- Inflamación de la zona afectada y de la mandíbula
¿Cómo aliviar el dolor?
Dependiendo del motivo, es posible calmar el dolor con analgésicos. Aun así, cuando hay infección los analgésicos duran cada vez menos y acaba necesitándose la toma de antibióticos.
Habitualmente, con las infecciones el antibiótico que se suele utilizar es la amoxicilina. Para las personas que son alérgicas a la penicilina, se utiliza pantomicina o clindamicina.
En relación a esto, es importante no automedicarse. Debe asistirse a la consulta del dentista para conocer cuál es la medicación idónea que se debe tomar para aliviar el dolor de muelas en cada caso.
Tratamiento del dolor de muelas
Dependiendo del problema que aparezca en el diente, se pondrá un tratamiento u otro. Por ejemplo, si la pieza dental tiene una caries, habría que quitar el tejido dental dañado y hacer un empaste de composite.
Si esta caries daña al nervio, habría que realizar una endodoncia y después restaurar la pieza dental con una incrustación o una corona dental. Además, si la muela no tiene arreglo, se tendría que quitar realizando una exodoncia.
Es muy importante poner tratamiento a las infecciones lo más rápido que se pueda, ya que no solo es un dolor muy intenso sino que es posible que la infección se propague si no te trata a tiempo.
Prevención
La prevención siempre es el mejor tratamiento, por lo que tener una buena higiene oral es muy importante. Además, para evitar la aparición del dolor se debe acudir al dentista frecuentemente.
Al visitar al dentista constantemente, es posible conseguir un diagnóstico precoz de las caries o de otras enfermedades antes de que ocasionen dolor.
Tu dentista puede adelantarse en el diagnóstico antes de manifestarse el dolor, evitando las infecciones y parando a tiempo cualquier enfermedad dental rápidamente y de forma efectiva.